Cómo hacerte famoso sin mover un dedo

Una vez más Internet da que hablar. Y tanto que da que hablar. Que se lo pregunten a Allison Stokke. Una joven de 18 años que ha pasado a ser una atleta cualquiera dentro de un condado cualquiera de los Estados Unidos a ser una de las caras más vistas en la red en las últimas semanas. Todo ha sucedido muy rápido. Esta californiana se ha convertido uno de los nombre más buscados dentro de Youtube. ¿Y qué ha hecho para ser tan importante? Nada.

Allison Stokke es una atractiva joven americana como cualquier otra.Práctica un deporte minoritario como es el lanzamiento de pértiga. Es buena, aunque no tiene nada más que algún título a estatal, lo que le valió para conseguir una beca para la Universidad de California. Hasta aquí nada extraño.

Todo comenzó cuando un usuario de un foro sobre fútbol americano en California subió a la página una foto de la chica. El responsable de un popular blog deportivo de Nueva York (con un millón de visitas al mes) se topó con la imagen y decidió publicarla. De allí saltó a otros cuadernos de bitácora, y en unos días cientos de miles de usuarios de Internet ya habían visto su cara en sus ordenadores. A partir de aquí ya os lo podéis imaginar. La foto empieza a correr por diversas páginas web, poco después aparece un video de unos tres minutos de duración y la bola de nieve se va agrandando de manera incontrolable.

La vida de Allison Stoke, y la de su familia entera, ha cambiado desde entonces. No para de recibir correos electrónicos y de llamadas a su teléfono móvil. Allá donde va la reconocen y no se atreve a quedarse sola en ningún momento.

Estamos, pues, ante un ejemplo de lo que internet puede hacer a la hora de cambiar la vida de una persona. Quién sabe si la persona que de manera inocente o no puso la fotografía de Allison en internet tenga algún día que arrepentirse porque el asunto allá ido demasiado lejos. Quién sabe si se producirá otro caso de similares características que cambie la vida de más personas, ya sea para bien o para mal. Cierto es que Internet ha servido para llevar a la fama a nivel personal o profesional a muchas personas, pero es incierto que alguna vez las consecuencias de este uso de la red tengan un efecto del que luego nos tengamos que arrepentir.